Ampliando las Oportunidades Económicas para las Mujeres Rurales Emprendedoras en América Latina

Agradezco al Gobernador de Oaxcaca, Gabino Cué Monteagudo y al Instituto de la Mujer Oaxaqueña por su colaboración en la organización de este evento y la hospitalidad para llevarlo a cabo.

La piedra angular del desarrollo sostenible del Estado de Oaxaca es la plena participación de las mujeres y las niñas en la política, en la economía, en la cultura, en las comunidades.

En el 58ª  periodo de sesiones de la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW), cuyo tema central fue los “Desafíos y logros en la aplicación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio para las mujeres y las niñas”, se hace un llamado a los Estados a respetar, proteger y mantener los conocimientos tradicionales y las innovaciones reconociendo el potencial de las mujeres rurales y las mujeres indígenas para contribuir a la producción de ciencia y tecnología y de un nuevo conocimiento para mejorar sus vidas, las de sus familias y comunidades.

En México, ONU Mujeres tiene cuatro áreas prioritarias de intervención y en cada de estas áreas realiza iniciativas estratégicas en el Estado de Oaxaca, ya que existe una importante alianza con el Gobierno del Estado y, en particular, con el Instituto Oaxaqueño de la Mujer, gracias a una activa colaboración y esfuerzos conjuntos.

En el área de Participación Política y Liderazgo se desarrolla la Iniciativa SUMA, democracia es igualdad  con el programa de formación regular en Oaxaca para fortalecer las capacidades de las mujeres candidatas a elección popular y visibilizar a las mujeres líderes, con el objetivo general de aumentar su participación y ofrecer capacitación durante el proceso. También dentro de esta iniciativa, en 2013 fue diseñado e implementado un programa de formación especializada y una estrategia para fortalecer el liderazgo de las mujeres candidatas indígenas en el Estado.

En el área de Erradicación de la Violencia contra las Mujeres y las niñas, ONU Mujeres colabora con el gobierno del estado en la formalización de las políticas. El 10 de septiembre de 2013, el Gobierno de Oaxaca firmó el Acuerdo para Garantizar el Derecho de las Mujeres, Niñas y Adolescentes a una Vida Libre de Violencia, donde los representantes de los tres poderes del gobierno del Estado, los organismos públicos autónomos, las instituciones académicas, los partidos políticos, las organizaciones de la sociedad civil, los sindicatos y los líderes religiosos, así como del sector privado y los medios de comunicación, expresaron su voluntad política y el compromiso de generar una política de Estado con el fin de prevenir, atender y sancionar la violencia contra las mujeres. ONU Mujeres colaboró en la elaboración del acuerdo y participó como testigo de honor y de su suscripción. Además, cada mes Oaxaca se une a la campaña Pintar México de Naranja para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas,

En el área de Presupuestos Sensibles al Género, ONU Mujeres ha desarrollado materiales didácticos y herramientas para los gobiernos locales. Oaxaca ha sido un estado de intervención durante el año 2013 y en este año está considerado en la implementación del proyecto “La incorporación de una perspectiva de género en los presupuestos públicos a nivel estatal y municipal”, que se ejecutará durante el 2014. El enfoque del proyecto es guiado por el objetivo de producir conocimiento y las herramientas pertinentes y útiles para apoyar las capacitaciones a nivel nacional, estatal y municipal y la armonización legislativa.

En el área de Empoderamiento Económico se desarrolla el programa Ampliando las Oportunidades Económicas para las Mujeres Rurales Emprendedoras en América Latina que nos tiene aquí reunidas, reunidos.

El Programa Ampliando las Oportunidades Económicas para las Mujeres Rurales Emprendedoras en América Latina corresponde a una iniciativa financiada por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) a través de una donación de 2.500.000 dólares y cuya implementación se encuentra a cargo de ONU Mujeres. El objetivo general del programa es contribuir al empoderamiento económico de las mujeres rurales empresarias en México, Guatemala, El Salvador y Nicaragua.

Los objetivos específicos de este Programa son: i) implementar procesos más eficaces para desarrollar las capacidades de las mujeres rurales para manejar y comercializar mejor sus emprendimientos de negocio y ii) a través de ello generar el empoderamiento económico y la capacidad de incidencia de las mujeres rurales en las decisiones, políticas y procesos locales de desarrollo de sus comunidades.

En ese sentido se espera que el Programa contribuya a que las mujeres rurales tengan un mayor liderazgo y participen en sus comunidades y en las instituciones rurales, así como en la configuración de leyes, políticas y programas. También se espera que las mujeres rurales que participan en las organizaciones objetivo tengan influencia sobre las prioridades y programas locales de desarrollo.

El grupo meta del programa son 100 organizaciones de grupos de mujeres que aglutinen aproximadamente a 2.500 mujeres rurales. Por lo menos un 60% serán mujeres indígenas y afro descendientes y, de ellas, el 30% serán mujeres jóvenes.

En su mensaje para el Día Internacional de la Mujer, la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, la Señora Phumzile Mlambo-Ngcuka, destaca que el empoderamiento de las mujeres y las niñas y el apoyo a su plena participación pueden resolver los retos más importantes del siglo XXI.

“Encontraremos soluciones duraderas a muchos de los problemas que tiene el mundo actualmente. De esta manera, se abordarían sustancialmente desafíos importantes como la pobreza, la desigualdad, la violencia contra mujeres y niñas y la inseguridad. Si fomentamos la igualdad de oportunidades y eliminamos las barreras estructurales que impiden el empoderamiento económico de las mujeres, reduciremos la desigualdad y potenciaremos un crecimiento económico inclusivo”

La desigualdad de género en la actividad económica tiene costos para la sociedad y también para la economía. La desigualdad genera menor crecimiento y un menor PIB, incluso más inestabilidad[1]. El costo directo de la falta de igualdad en el mercado laboral latinoamericano equivale a casi el 4% del PIB de la región, unos 100,000 millones de dólares por año[2]. En fechas recientes se registró que en México, el 52.3% de las mujeres con niveles de calificación de 10 a12 años no entraba al mercado laboral[3]. Es decir, que a la inversión en educación no sigue una inversión en desarrollo humano y económico, en igualdad de acceso al mercado laboral y de aprovechamiento de trabajadoras y profesionales perfectamente competentes.

En ese sentido, un reto fundamental es ayudar a que las mujeres efectúen la transición desde empleos autónomos de baja productividad a empresas más rentables. El primer paso para ello consiste en abandonar la idea de que las mujeres optan por limitarse a actividades de escaso valor.

Y es, precisamente, lo que el programa Ampliando las Oportunidades Económicas para las Mujeres Rurales Emprendedoras en América Latina busca impulsar, a través de  enfoques y procesos más eficaces para desarrollar las capacidades de las mujeres rurales para manejar y comercializar mejor sus emprendimientos de negocio.

Como resultado de este programa, esperamos que las mujeres emprendedoras rurales tengan un mayor liderazgo y participen en sus comunidades y en las instituciones rurales, así como en la configuración de leyes, políticas y programas. Y por otro lado, confiamos en que se habrán desarrollado nuevas herramientas y productos de conocimiento para promover el empoderamiento económico de las mujeres de manera más eficaz en proyectos futuros.